La Guardia civil desarticula una de las mayores bandas delictivas especializadas en el robo de cables de cobre en instalaciones fotovoltaicas de Sevilla. Han ocasionado pérdidas al sector de un millón de euros, fueron detenidas ocho personas.
Se han demostrado 17 delitos y han intervenido los cuatro vehículos que utilizaban los delincuentes. Desde septiembre del 2019, agentes pertenecientes al Equipo de Patrimonio iniciaron esta operación para identificar a los responsables de numerosos delitos de robo con fuerza cuyo principal objetivo era el cable de cobre en el interior de instalaciones fotovoltaicas en la provincia sevillana.
Según el comunicado de la Guardia Civil y del artículo del ABC.
Método delictivo de los presuntos delincuentes.
Los robos se realizaban a altas horas de la noche y los autores se introducían con sus vehículos a través de caminos o vías rurales de difícil acceso a lugares que anteriormente habían visitado y estudiado.
Una vez en el lugar, usaban herramientas de corte para romper el vallado principal y se dirigían a las arquetas, donde se hallaba los cables, a continuación, sustraían el cable de cobre que da servicio a las placas solares y lo cargaban en sus vehículos, por lo general de tipo berlina, con capacidad suficiente para trasladar la carga.
Los cables los descargaban en descampados situados en las proximidades de Torreblanca, donde quemaban la funda exterior de los cables, por ello era imposible averiguar la procedencia del mismo en caso de ser recuperado.
En uno de los robos por marzo se incautaron 3.000 kilos de cable aún sin pelar. Algunos de los sospechosos tienen múltiples antecedentes, uno de ellos actualmente cumple condena en prisión.
De la operación Torrecooper se encargan los juzgados de Sevilla y Lora del Río y no se descartan más detenciones.
